jueves, 2 de julio de 2015

Parque Chas. Pequeño Laberinto.


Reseña histórica



Hay que remontarse a 1889 en el Antiguo Municipio de Belgrano en Buenos Aires, para poder hablar del origen de Parque Chas. El terreno entonces comprendido entre las calles La Pampa, Constituyentes, Los Incas y Triunvirato. Se ubicaba detrás de los montes de la Chacarita y del otro lado del arroyo Maldonado, lo que lo describe como escenario de grandes aventuras porteñas guaperas propias de nuestra literatura, el cual pasa a formar parte del patrimonio de los Chas, una familia reconocida a fines del siglo XIX Y principios del siglo XX.

Hasta 1920, simplemente se trataba de una extensión de latifundios aledaños a la casa de Vicente Chas, quién a partir de esa década impulsó la urbanización del terreno. A raíz del descontento con el repetitivo paisaje, de calles infinitas, generado por el tradicional trazado ortogonal. Las ideas para tratar de no agregar monotonía y fealdad a la ciudad dieron origen a varias propuestas de trazado para el proyecto de Chas.

Entre algunos de los elementos que se debían introducir a través de estos trazados, estaba “lo pintoresco” como producto de la mezcla de un trazado concéntrico y el clásico lineal. El fácil ingreso y egreso hacia los principales puntos adyacentes como Villa Urquiza, Agronomía, Chacarita y Belgrano mediante las diagonales que confluyen hacia un rond-point ubicado en el centro del actual trazado pretendía ser otro de los logros obtenidos gracias a la urbanización del futuro Parque Chas.


El mejor aprovechamiento de los lotes en función de un tamaño límite de 35 metros de largo y el posterior aumento de superficie destinado a espacios públicos también formaban parte de estas innovadoras propuestas de trazado. Aunque la verdadera preocupación de Chas era dejar de aburrir con la repetición de calles invariablemente iguales y lograr un aspecto más variado y agradable.

Proceso de selección


Inicialmente teníamos 3 opciones. Zona de Tribunales, Zona Costanera Sur - Puerto de la Ciudad Autónoma de Buenos Aires y la finalmente escogida Parque Chas. 
Pensando en los aspectos geográficos que cada una podía presentarnos, analizando las posibilidades de cada opción, Parque Chas fue la que mas cumplía con lo que estábamos buscando: un trazado de calles que rompa con el clásico ortogonal de las grandes urbes.


Relevamiento fotográfico























  













Análisis del espacio

Calle Circular: Conduce en círculo rodeando las 6 porciones de pizza que constituyen la manzana circular ubicada en el centro neurálgico del barrio. Esta calle es Berlín y si la tomamos y respetamos su sentido nunca nos iremos del barrio.
Calle Recta: En diversos sentidos, cualquiera sea la calle recta que tomemos, nos permitirá ingresar o salir del barrio. Es importante saber algunas calles rectas pueden “morir” en una calle de otro tipo (circular o híbrida).
Calles Híbridas: Son calles que se adaptan a la geografía que imponen los otros dos tipos de calles. Desde la forma circular que tiene Berlín se desprenden Londres-Dublin (cambian de nombre como de dirección) y Cádiz-Bucarelli. Estas calles operan como nexo entre las rectas y las circulares, es por ello que mediante ellas es posible tanto ingresar en un infinito “quedarse en el barrio” como explorar las diversas posibilidades de ingreso y salida del barrio.

Algoritmo



Mapa 

El mapa, despojado de referencias de alturas, calles y sentidos de transito, tiene descritos los recorridos posibles con el algoritmo aplicado, .






Interfaces


Contamos con un kit que incluye:
  • Mapa del espacio geográfico con los recorridos trazados.
  • El algoritmo impreso a modo de instructivo de la deriva.
  • Requerimos el uso de dispositivo con gps y cámara fotográfica.
  • Rama de árbol (especie Paraíso) ubicada en puerta de escuela.
  • Dinero para la pizzería.


Deriva grupal